
"Diversas calles se empezaron a inundar de combustible. Vino un chispazo y eran ríos de fuego lo que veíamos en las calles", fue la infernal descripción que realizó el secretario de gobernación del estado de Puebla, Valentín Meneses, tras la desastrosa explosión de una cañería de la empresa Petróleos Mexicanos (Pemex) que estaba ubicada en una zona urbana.
"Tenemos que lamentar 27 personas fallecidas, doce de ellas menores de edad, y hay 52 heridos", detalló Laura Gurza, de la Gobernación de México, mientras que su colega Francisco Blake apuntó que el número de víctimas "es preliminar, podría aumentar a medida que continúan los trabajos de búsqueda y rescate entre los escombros".
La devastadora explosión del ducto petrolero se registró cerca de las 5.50 horas, cuando los residentes dormían en sus hogares de la ciudad de San Martín Texmelucan, en el estado de Puebla, centro de México.
Las autoridades informaron que preliminarmente la línea de investigación apunta a una eventual "toma clandestina" desde la cañería, lo que se habría salido de control debido a la alta presión interna del ducto.
La petrolera estatal sostuvo que desde hace tiempo sufren el ataque de bandas que perforan las cañerías para robar combustible.
No hay comentarios:
Publicar un comentario